¿Qué es la blefaroplastia?
La blefaroplastia es una intervención quirúrgica en los párpados cuyo objetivo es rejuvenecer la imagen del rostro. El procedimiento consiste en la remodelación del párpado superior o inferior eliminando y reposicionando el exceso de tejido y reforzando los músculos y tendones circundantes.
Además de obedecer a razones estéticas, la operación del párpado superior también puede ayudar a mejorar la visión, ya que, cuando el exceso de piel cuelga sobre las pestañas puede dificultar la visión periférica. La operación del párpado inferior es hecha casi siempre por razones estéticas, buscando eliminar las bolsas y reducir las arrugas.
La operación consiste en realizar una serie de incisiones externas a lo largo de las líneas naturales de los ojos. Esta intervención dura entre una y tres horas, dependiendo del caso, y se realiza con anestesia local y de manera ambulatoria, ya que no es necesario que el paciente permanezca ingresado.
La recuperación de esta operación es rápida, ya que la hinchazón y los hematomas iniciales desaparecen en una o dos semanas. Sin embargo, el resultado final no se aprecia totalmente hasta después de varios meses.
Existe otra variante llamada blefaroplastia láser que va haciéndose cada día más popular. Esta cirugía es aún más sencilla y permite una recuperación más rápida, ya que no se realizan incisiones durante la operación. Este procedimiento usa un rayo láser para hacer una incisión precisa, a la vez que cauteriza los vasos sanguíneos, consiguiendo reducir al mínimo la pérdida de sangre. Esto hace que la técnica sea más segura y eficaz y que presente menos riesgos y efectos secundarios. Además, con esta cirugía se evitan las cicatrices en las semanas posteriores a la intervención y la inflamación y los hematomas son mucho menores. El proceso de recuperación es más corto y los resultados son más duraderos.
Otra variante es la blefaroplastia de párpados asiática o cirugía de párpado doble, ya que las personas de esta raza tienen la piel de los párpados más gruesa y con mayores depósitos de grasa. Además, la mitad de ellos nacen sin el pliegue del párpado superior. Esta cirugía permite agregar un pliegue al párpado superior para darle al ojo un aspecto más redondeado y grande.
En cuanto a la cirugía de párpados inferiores también puede realizarse utilizando la blefaroplastia transconjuntival, que es una alternativa que no deja cicatrices. Se utiliza en pacientes que tengan bolsas poco pronunciadas debajo de los ojos, eliminando los depósitos de grasa sin quitar la piel sobrante. Para ello, se realizan varias incisiones diminutas dentro de los párpados inferiores, por lo que no quedan cicatrices visibles.